Poesía Indie

Imágenes Paganas
Por Eduardo Valdivia Sanz
Capturar tu sonrisa
me parece un trabalenguas de Cortázar,
un suspiro en el medio del cemento fresco,
cada tarde llego con paso de plomo,
arrastro un sueño de oficina convertido
en cansancio,
las luces artificiales golpean a mis ojos,
mi mirada se detiene disparando balas a las sombras,
cuerpos amorfos que beben agua azucarada y gas,
me dirijo al culto del hambre,
los colores rojos, azules, amarillos
me rodean como una mano huesuda,
no soy feliz,
pero guardo trozos de plástico
que me abren labios y dientes,
sonrisas frías, estáticas,
sobre rostros de goma,
la mujer que oficia de sacerdotisa estatua,
pregunta:
doble queso o simple,
con miedo respondo,
simple y una botella de agua,
la sacerdotisa sonríe y yo no quiero sonreír,
espero mirando a las sombras
por mi harina con tomates,
una mujer gorda se acerca a la sacerdotisa,
arrastra triglicéridos y un humor de espantapájaros,
muestra dientes felinos
y baba verde,
animal brutal que conoce donde sacar sus garras,
la sacerdotisa sonríe,
de qué te ríes idiota,
la chica quiere esconderse
hundirle las uñas en los ojos,
ahoga un llanto y sonríe,
la gorda escupe su rabia
y yo, silencioso,
cobarde y complacido
con un trozo de pizza en la mano.