Poesía Indie
Delirios de una tarde de karma
Por Eduardo Valdivia Sanz
No me lembro de nada ni de los sueños más usados,
hoy muero despacio cual cordero que le cortan el cuello
en dirección a
como cuadro de fuego que recorre desiertos de mar;
fantasmas de viento estafando a la muerte,
dibujando demonios de ojos rasgados;
Kid Abhela es un espejo de mi vida hecha de piedras,
hartazgo de una tarde,
agujas en el codo,
un sabor de curry y de hongos de caballo
es un vuelo que parece un anuncio de tele,
mil pastillas de colores corren al mar,
al norte,
en un intento de hallar a buda
bajo el olor a pintura de mi caserón,
que cementerio de ancestros marchan detrás de mí,
la abuela Mercedes,
el abuelo fascista,
arrojando bombas sobre mi presente,
es el pasaporte de dos colores y dos mundos antagónicos.
Comentarios
Publicar un comentario