Poesía de bares
De la luna voló una bruja
Por Eduardo Valdivia Sanz
Tus ojos se asemejan a las medias lunas
y en tu frente nace una corona,
una perla negra
que pulo con desvelo,
cual fragor de una tumba,
sintiéndonos perezosos por la mañana
cansados de las palabras,
quiero ser una piedra,
apagar la conciencia,
diciendo, por favor,
no te vayas con los gorriones,
es tan simple caer enredado
por un sueño de la ciudad,
no seas boba,
tu historia parece una calle del centro,
cuántas veces contarás las margaritas,
el río no tiene agua,
la noche siempre llega,
es imposible no hacernos daño.
Por Eduardo Valdivia Sanz
Tus ojos se asemejan a las medias lunas
y en tu frente nace una corona,
una perla negra
que pulo con desvelo,
cual fragor de una tumba,
sintiéndonos perezosos por la mañana
cansados de las palabras,
quiero ser una piedra,
apagar la conciencia,
diciendo, por favor,
no te vayas con los gorriones,
es tan simple caer enredado
por un sueño de la ciudad,
no seas boba,
tu historia parece una calle del centro,
cuántas veces contarás las margaritas,
el río no tiene agua,
la noche siempre llega,
es imposible no hacernos daño.
Comentarios
Publicar un comentario